Son muchos quienes piensan que los niños abandonan el lugar que les forma, ese que les procura el futuro que añoramos para ellos, en busca de la pretendida ilusión que jamás podrá aportar el mayor tamaño de un juguete, ni siquiera la televisión, ni la tecnología que nos aparta del ser humano que nos da sentido.
Sí, queridos amigos de Grupo Mt, la Navidad llena el espacio de las aulas tan pronto como las abandonan de forma temporal aquellos que las habitan, esas sonrisas que se convierten en silencio por unos días, esos ojos que brillan y miran dispuestos a pensar que lo que han de ver merecerá la pena, si los mayores no nos enredamos en enseñarles eso que jamás debimos haber aprendido.
Las aulas esta Navidad, como cada Navidad, permanecerán llenas de las voces que resguardan sus paredes del hastío, permanecerán llenas del cariño de los maestros que, “hartos de tanto niño”, no hacen más que añorar el día de vuelta, cuando cada uno cuente sobre tanto regalo, tanto juego y tanto desorden que tratará de ser ahormado de nuevo.
Esta Navidad, como cada Navidad, nuestras aulas, las aulas de nuestros hijos, permanecerán repletas de esperanza, esa que nunca ha de abandonarnos, ese motivo por el que cada niño que nace merece nuestro esfuerzo.
Hoy, como antes, tenemos esperanza por alcanzar un mundo mejor; esperamos que cese la violencia inane, que cesen los gritos y malentendidos en casa; esperamos que sean ellos, los niños, quienes nos muestren siquiera un ápice de su alma casi sin estrenar a ver si, con las aulas vacías, nosotros también nos llenamos de las esperanza con la que las llenaron al partir, y que tal vez por unos días, logre darnos sentido.
Grupo Mt les desea a todos ustedes una muy Feliz Navidad y un muy Feliz Año Nuevo en compañía de todos, de los más queridos y de aquellos que tal vez podamos aprender a querer.